Marina Planas

La idea inicial de este proyecto era realizar una acción: una intervención en el cuerpo del espectador mediante la inscripción del dolor. Para ello quería invitar al otro a una habitación oscura en la que supuestamete tenía que haber una mesa con unos documentos y en la que se escuchaban una serie de instrucciones (sientate en la silla, vendate los ojos...) que llevarían al oyente a experimentar la violencia de una agresión. La primera acción será realizar un pequenyo corte de dos centimetros de largo...

 

El gesto de transferir al oyente la experiencia traumática mediante la tecnología del dolor a través de un resultando en una intervención sobre su cuerpo dejando una inscripción/cicatriz/marca. El asistente debía estar dispuesto a ofrecer su cuerpo como lugar de registro y a seguir una serie de instrucciones (quítate la venda de los ojos, lee el primer texto que se encuentra encima de la mesa…) para acceder a un relato oscuro que podría continuar escuchando, si estuviese dispuesto a seguir sometiendo su cuerpo a esta agresión. A partir de este momento la acción estaría en sus manos.

 

Al final de la acción se documentarían las heridas y se producirán una serie de postales incidiendo en la idea de un recuerdo infeliz. 

 

El documento restante es la metáfora del reverso de la postal, el souvenir oscuro.

 

Presenté este proyecto pero el Museo de Es Baluard, me pidieron que lo adaptase a una maqueta y finalmente quedó un vídeo y una postal. 

 

En esta pieza trabajo temas como la experiencia, el dolor, el cuerpo invisible, la presencia y la ausencia (el espectador nunca me ve aunque estoy presente), registro, violencia, sumusión, obediencia, autoridad y género.